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El Parque Nacional de Doñana, declarado
Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, sigue hipotecado por una larga lista de amenazas que
podrían hacer desaparecer el humedal para siempre.
De todas ellas, la sobreexplotación de las aguas
subterráneas es, sin duda, la gran amenaza de uno de los espacios naturales
con mayor biodiversidad de Europa. A pesar de que
sus aguas están
protegidas por la legislación autonómica, nacional y europea,
existiendo normas administrativas suficientes para mantenerlas en buen estado
de conservación, estas no
se aplican a tiempo, se aplican mal o simplemente no se aplican.
La administración reconoce que unas 1.500 hectáreas de cultivos
ilegales rodean el Parque Nacional. Herencia de la mala
planificación incipiente en los años ochenta, el actual sistema agrícola de
regadío se ha descontrolado y supone unos usos, legales e ilegales, de las
aguas superficiales y subterráneas que están amenazando el humedal.
Todas estas alteraciones, junto a
la presencia de plantas
invasoras, el ganado doméstico y los recientes incendios están afectando a
muchas de las especies de aves que habitan el humedal y el
bosque mediterráneo del Doñana. La cerceta pardilla, el avetoro
común, la focha moruna y la malvasía cabeciblanca, son algunas de las
especies que más están sufriendo la alteración del régimen hídrico de Doñana.
En 1953 lanzamos nuestra
primera campaña para salvar Doñana: 11 hojas mecanografiadas a máquina que enviamos a Francisco Franco y
que lograrían salvar a las marismas de ser desecadas para tierras de cultivo
y eucaliptos. Gracias al
increíble apoyo de nuestros socios, desde entonces, no hemos dejado de
defender el parque. No nos importa quién esté
delante, nuestra misión es proteger la naturaleza y salvaguardar a las aves
que habitan en ella.
Pero en Doñana, como ocurre con muchos otros
humedales de nuestro territorio, se
mueven importantes intereses económicos para los que la
conservación del medio ambiente es la última prioridad. Frente a ellos, tenemos que ser cada
vez más fuertes y por eso, más que nunca, te necesitamos
a nuestro lado.
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